Es por eso que el proyecto Monterrey VI es de especial interés para nuestra organización. En los últimos 50 años la gestión del agua en los países desarrollados ha pasado de una perspectiva intensiva en capital e infraestructura a una nueva visión que plantea la gestión a nivel cuenca.

En ese sentido, el Proyecto Monterrey VI, tal y como está planteado actualmente, es un retroceso para nuestra comunidad.” Indicando que “El reciente estudio ‘Seguridad Hídrica del Área Metropolitana de Monterrey y la Cuenca del Río Panuco’, elaborado por The Nature Conservancy (TNC), se suma a muchos otros análisis que cuestionan la viabilidad de Monterrey VI. Por ello hemos solicitado a las autoridades llevar a cabo un diálogo técnico que dé respuesta a las legítimas preocupaciones de un amplio sector de la sociedad civil y la academia respecto al proyecto.”

“Agua y Drenaje ha intentado desacreditar el estudio de TNC para justificar su proyecto, perdiendo de vista los temas de fondo que son los que preocupan a la sociedad y al FAMM: 1. ¿El proyecto Monterrey VI es la mejor opción para nuestro estado? 2. ¿Cuáles otras opciones se consideraron, que criterios de selección usaron, y por qué se eligió el actual proyecto? 3. ¿Los costos no incluyen obras necesarias para la viabilidad del proyecto como la construcción de una nueva planta para potabilizar el agua del Pánuco ni la necesidad de otro acueducto para traer el agua de la presa Cerro Prieto a Monterrey? 4. ¿Ya se consideraron las diferencias en calidad de agua del Río Pánuco vis a vis las que tenemos en la Presa Cerro Prieto y el costo de su tratamiento? 5. ¿Por qué no se comienza por hacer más eficiente la agricultura en el estado?, este sector consume más del 70% del agua en Nuevo León, y con inversiones mucho menores se pueden alcanzar grandes ahorros de agua, que equivalen, conservadoramente, a más del 80% del agua que el Monterrey VI contempla traer. Estos y muchos otros cuestionamientos deben ser resueltos por las autoridades.

El FAMM demanda que este proyecto se analice de manera participativa y su ejecución se postergue o cancele hasta que el proyecto haya sido exhaustivamente transparentado, explicado y dialogado.”